En Talat siempre nos las ingeniamos para llegar a las soluciones más eficientes. En este caso, hoy queremos contaros cómo evitar sobreiluminación y el consumo innecesario mediante una combinación de análisis técnico, diseño optimizado y tecnología eficiente.
Te chivamos algunas de nuestras estrategias:
1- Primero, es necesario conocer las necesidades lumínicas.
Con estudios de luminancia para calcular cuánta luz necesita cada espacio según su uso (por ejemplo, 150-300 lux para salas de estar, 500 lux para oficinas, 100 lux para pasillos).
Otro método, es “zonificando el hogar”. Esto es, dividiendo el espacio en zonas con diferentes requisitos de iluminación, evitando iluminar en exceso áreas de tránsito o poco uso.
2- El segundo paso, sería diseñar el sistema de iluminación de nuestra casa, oficina, espacio, en general. ¿Cómo?
Por ejemplo, colocando luces en puntos clave para maximizar su alcance como una lámpara central, la cual puede ser suficiente para una habitación pequeña.
Optar por luminarias con haces de luz enfocados para iluminar superficies específicas, ejemplo, una mesa de comedor, en lugar de dispersar la luz innecesariamente.
Evitar luces excesivamente potentes que provoquen deslumbramientos o consuman más energía de la necesaria.
3- Optar por Tecnología eficiente
LED regulables que permitan ajustar la intensidad según las necesidades reduciendo el consumo en momentos de menor demanda.
Instalar Sensores de ocupación. Para que las luces se enciendan solo cuando hay personas en la habitación.
¿Conoces los sensores de luz natural? Estos incorporan tecnología que ajusta la iluminación artificial en función de la cantidad de luz natural disponible.
4- Esta opción siempre será la mejor: Aprovechar la luz natural
Con un diseño bioclimático– Organizando la disposición de ventanas, tragaluces y materiales reflectantes en techos y paredes para maximizar la iluminación natural.
Con sistemas automáticos de control. Por ejemplo, persianas motorizadas o vidrios electrocrómicos que regulan la entrada de luz natural, reduciendo la necesidad de iluminación artificial.
5. Estar actualizado en cuanto a la normativa actual
Seguir estándares internacionales como los de la IES (Illuminating Engineering Society) o los códigos de construcción locales, que especifican los niveles de iluminación recomendados para cada espacio.
Asegurarse de que las luminarias instaladas no generen un exceso de luz en comparación con las necesidades del espacio.
6. Automatización y control inteligente
Por eso, en Talat nos especializamos en Domótica y programación: Estos sistemas inteligentes permiten programar horarios de encendido/apagado y ajustar la intensidad según la hora del día o el uso del espacio.
Segmentación de circuitos: Esto es, dividir las luces en diferentes circuitos controlados de manera independiente, permitiendo encender solo las necesarias en cada momento.
7. Buscar unos profesionales como los que tenemos en Talat que dediquen tiempo a los usuarios.
Constituye una acción importante, el hecho de enseñar a los habitantes a usar la iluminación de manera eficiente, como apagar luces al salir de las habitaciones o usar solo la luz necesaria para una tarea específica.
Con todas estas acciones, evitaremos el desperdicio de energía además de optimizar la experiencia lumínica del espacio, logrando:
- Ahorro energético y menor costo en facturas.
- Mayor confort visual, eliminando el deslumbramiento o la incomodidad por exceso de luz.
- Impacto ambiental reducido, contribuyendo a la sostenibilidad.
En Talat, nuestro enfoque de Ingeniosofía combina herramientas tecnológicas y diseño para lograr una iluminación funcional y eficiente.
Esperamos que este artículo sobre cómo evitar la sobreiluminación resulte de ayuda. Si cabe cualquier duda, nos encantaría conocer tu historia ⛓️💥